
La muerte es un acontecimiento repentino, nadie sabe con exactitud cuándo llegará el fin de su vida. Es por ello que los abogados divorcio Cáceres recomiendan a todos sus clientes, actualizar el contenido de su testamento una vez se haya formalizado la separación o disolución del vínculo matrimonial.
Sin embargo, siempre hay alguno que ignora esta recomendación y no se ocupa de su testamento a tiempo y cuando la persona muere, se origina lo que legalmente se conoce como sucesión ab intestato.
Este es el escenario que mayores complicaciones trae a los herederos, puesto que al desconocer la voluntad expresa del difunto, sus derechos y propiedades deben distribuirse según las reglas del Código Civil. Una de estas dificultades, se presenta cuando el mismo estaba separado de hecho y su cónyuge pretende participar en la partición de bienes.
En principio, parece una situación simple. El artículo 945 del Código Civil establece que el cónyuge que esté separado legalmente o de hecho, no tendrá derecho a suceder. Pero en la práctica no es tan sencillo como se lee en la ley.
Ciertamente, de la lectura del Código Civil queda clara la inexistencia del derecho sucesoral del cónyuge separado de hecho. Pero al no constar un documento legal o judicial que demuestre dicha condición, siempre existe la posibilidad de que demostrarlo se convierta en un tema controvertido. Es decir, los herederos legítimos podrían enfrentarse a un eventual litigio, que pudieran ganar o perder.
En este sentido, si el cónyuge sobreviviente negare la separación, los herederos deberán emprender un procedimiento para demostrar que el mismo no tiene derecho a participar de la sucesión. Esto debe realizarse a través de medios legítimos y suficientemente idóneos, toda vez que es a ellos a quienes les corresponde la carga de la prueba.
En conclusión, se trata de un asunto aparentemente sencillo, que podría complicarse según las particularidades de cada caso. Por tanto, si se encuentra separado, no dude en realizar un testamento, de este modo evitará a sus familiares el litigio en contra de su cónyuge y garantizará que sus bienes y derechos sean otorgados de acuerdo a su voluntad.